Hoy en día las personas necesitan trabajar en muchos roles
al mismo tiempo. Somos empleados, profesionales, deportista, empresarios,
miembros de una comunidad y no menos importante padres o madres. Es por eso que
en muchas ocasiones nos equivocamos descuidando algunos roles provocando así un
desorden en nuestra vida.
Se necesita de la eficacia para poder llevar a cabo todas
las actividades importantes en el menor tiempo posible. Así es como podemos
llevar una vida equilibrada sin descuidar áreas que son de vital importancia.
En este mensaje de superación personal vamos a tocar algunos puntos para ser
más eficientes en nuestra superación personal.
Antes de empezar con los puntos importantes quisiera poner
un ejemplo sobre como un des-balance en algún área de nuestra vida nos puede
traer serias consecuencias.
Podemos poner el caso del profesional que ambiciona ser
gerente de una empresa. Este individuo también posee una familia, la cual
quiere mucho, pero que sin embargo se encuentra ante la tentación de hacer un
esfuerzo extra para llegar más rápidamente a su objetivo laboral.
Hace más viaje de negocios, se ausenta por mucho más tiempo
en su hogar, ya descuida su relación con sus hijos y esposa.
Esto provoca que, no mucho tiempo después, su familia se
encuentre con una necesidad insatisfecha e intente conseguirla satisfacer por
otros caminos. Los vicios, las malas amistades, la depresión y los problemas no
tardan en aparecer.
Un tiempo más tarde la ambición de ser gerente, de nuestro
protagonista, se hacer realidad pero también se encuentra con una familia muy
poco feliz y con serios conflictos que resolver.
Ahora una buena pregunta sería ¿Es esto ser eficiente?
El Dr. Stephen Covey afirma que la eficacia es producto de
un equilibrio de los factores P.C.P. En la que “P.” es producción de resultados
deseados, es decir la meta que te propones lograr. Y “C.P.” significa capacidad
de producción, es decir el conocimiento, las habilidades y actitudes.
Para tener eficacia necesitamos una justa valoración de las
áreas mental, físico, emocional y espiritual. De forma que cada rol sea
cumplido, en vez de ser dejado de lado por alguna otra actividad.
¿Cuál es la solución?
Ponernos metas equilibradas, es decir que el resultado
deseado nunca debe superar nuestra capacidad de producción. En muchas ocasiones
es difícil de definir pero aquí es donde está la clave.
Si necesitas dejar el área familiar (área emocional) para
cumplir una meta profesional (área mental) es que aún no has desarrollado una
suficiente capacidad de producción. Quizás una meta menos ambiciosa a corto
plazo y un buen plan de trabajo en tus habilidades, conocimientos y actitudes
puedan bastar para un progreso considerable sin perder el control de ciertas
cosas que te pudieran traerte serias consecuencias en un futuro.
Para terminar me gustaría hacer una diferencia entre eficaz
y eficiente:
Considero que las personas eficientes son mucho más felices
y productivas ya que logran sus objetivos con la menor cantidad de tiempo y
recursos. Ponen su mirada en sus objetivos pero no descuidan la administración
de las cosas importantes.
En cambio la persona eficaz logra sus objetivos pero lo hace
sin importar el tiempo, ni los recursos, ni los valores que pueda perder en el
camino.
A partir de este momento espero que decidas ser una persona
eficiente.
¿Te ha gustado este mensaje de superación? Si tu respuesta
es “si me ha gustado” déjame tu comentario, me motiva mucho saber que hay
personas como tú que ambicionan ser mejores…
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